9 abr 2007

Nace un puerto seco metropolitano

Antes de fin de año iniciará actividades el desarrollo para operaciones modales de transporte más ambicioso visto en los últimos años. Se trata de Puerta México, Terminal Multimodal, un complejo cuya importancia reside en que descongestionará la saturada Terminal Intermodal de Pantaco, por donde ahora entran el 80% de los productos que abastecen a la Ciudad de México.

Puerta México, encabezada por Alejandro Solórzano, también representa una de las mayores inversiones privadas en un “puerto seco”, que podrían rebasar los 50 mdd en infraestructura, aduanas y equipamiento para operación contenerizada, de carga general y a cielo abierto.

En las afueras de Toluca, el complejo ha sido construido en una superficie superior a las 50 hectáreas, donde recibirá simultáneamente tres líneas de trenes de 75, 110 y hasta 120 carros en sus patios que poseen más de tres kilómetros de vías sobre concreto hidráulico.

Por ello será indudablemente en muy poco tiempo, el principal recinto de desembarco para los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas, con tráficos del ferrocarril Kansas City Southern-México de Guillermo Zozaya o Ferromex de Alfredo Casar.

La terminal situada en paralelo a la autopista Toluca-Atlacomulco se beneficiará también de una “zona franca” o Recinto Fiscal Estratégico, que le permitirá desaduanar y transferir mercancías directamente desde los barcos que arriban a los citados puertos marítimos, lo que ahorrará tiempos de tránsito y abatir costos por demoras.

Tecnológicamente, el complejo marca un parteaguas porque sus 30 mil metros cuadrados de vialidades, además de las ferroviarias, sus casi tres mil metros de áreas “cross-dock” (cruce de anden de camión a camión o a tren), bodegas y almacenes para automóviles nuevos, cuentan con circuito cerrado de televisión, video y fibra óptica.

Con todo ello, sin duda la Terminal Intermodal de Pantaco propiedad del Ferrocarril del Valle de México (Ferrovalle) que encabeza Alejo Ochoa, quedará sumamente rebasada, dicho sea de paso, porque sigue siendo un recinto altamente deficiente en sus operaciones, con infraestructura obsoleta y con un tránsito de camiones que ya no soporta la zona de Azcapotzalco.

Otra terminal que resentirá el poder de competencia de Puerta México, será la Terminal Intermodal de Querétaro de José Luís Muñoz, un complejo que nada más no acaba de despuntar, tras casi 10 años, por la falta de tráficos y sobre todo de visión y promoción de negocios. Es decir, ésta Terminal quedará a dos fuegos, entre Guanajuato, Puerto Interior, el mayor “puerto seco” del país y Puerta México que sólo de entrada ya tiene su primer cliente: Toyota que viene con todas sus importaciones.

Un alfil para Calderón

Quien anduvo desatado en el Sea Trade de Cruceros de Miami, fue el Coordinador de Puertos y Marina de México, César Patricio Reyes Roel, quien dijo a quienes quisieron escucharlo que todo es cuestión de tiempo para que el presidente Felipe Calderón, le nombre Secretario del Turismo en sustitución de Rodolfo Elizondo.

Trascendido que, en el placentero viaje, no cesó en asegurar que tan pronto Elizondo vaya a buscar la gubernatura de Durango por el PAN a Calderón no le quedará otra que cumplir su compromiso político-financiero con los puertos. En estas, varios directores de puertos ya se andan sintiendo más que desprotegidos.

Hutchison y Manolito

Antes de promover sin recato ético el megapuerto de Punta Colonet, el subsecretario del Transporte, Manuel Rodríguez, debería aclarar porque el proyecto de factibilidad económica no incluyó o previó que esa bahía ya estaba concesionada a Grupo Minero de Baja California de Gabriel Chávez.

Es público que la agencia Mercer Investment Consulting, que dirigía Rodríguez, fue contratada por el entonces secretario Pedro Cerisola, cuando la Secretaría de Economía, había otorgado ya el título de concesión minera, lo que no se quiso o no se detectó por la afamada agencia. También habría que preguntar porque la insistencia de beneficiar con ese estudio un monopolio portuario en Colonet en favor de Hutchison Port Holdings de Jorge Magno Lecona.